domingo, 3 de abril de 2016

Esta es una noche triste para un amigo. Descubrió que un fontanero (plomero en España) cobra más por una fuga de agua, que lo que él puede cobrar como psicólogo deportivo especializado en pádel. Mi comentario de hoy va dedicado lógicamente a él. Ganaron Pablo Lima y Fernando Belasteguin en el Open de Gijón, agrandando la brecha de puntos que separan a los primeros del resto. Esta pareja pierde los puntos de la semi del Master de Barcelona 2015 (1080 puntos la pareja), suma los de la victoria del Open de Gijón (2000) y se mantienen como números 1 del ranking con 30.000 puntos. Matías Díaz y Maxi Sánchez fueron los perdedores de la final de hoy. Logrando un excelente nivel de compenetración y juego. Además, arrebataron la segunda posición en el ranking a Sanyo Gutiérrez y Paco Navarro. Efectivamente pierden 1635 puntos de Barcelona 2015 (1500 de Mati que ganó el torneo y 135 de Maxi que llegó a octavos). Ahora suman 1200 por la final del Open de Gijón 2016 para un total de 14680 puntos. Suben a la segunda posición con la ventaja de no tener que enfrentar a los número 1 hasta una supuesta final. Sanyo Gutiérrez y Paco Navarro pierden la segunda posición también debido a los 1635 puntos que pierden de Barcelona 2015 (recuerden que Mati era pareja de Paco y Maxi de Sanyo). Ganan 720 puntos del Open de Gijón 2016 y se colocan en la tercera posición del ranking del World Pádel Tour con 14510. Unos pocos puntos de diferencia, pero valen de mucho. Quiero aclarar, por si hiciera falta o alguien se pudiera sentir molesto de antemano, que mi apreciación es objetiva y totalmente profesional. Mi único objetivo es el bien del deporte que tanto quiero, la ayuda a los jugadores y jugadoras y el desarrollo del circuito World Pádel Tour. Por un lado me gusta el trío que se formó con Andrea, El Uruguayo y Enrique en las transmisiones de los partidos. Le dan frescura, ya estamos acostumbrados a ellos, conocimiento de la intimidad y están allí pase lo que pase. Además Oscar, El Uruguayo, escribe bastante bien. No me gusta que ninguno de los 3 sepa exactamente de lo que habla, ni técnica, ni táctica, ni nada específicamente relacionado con el pádel. Últimamente, tanto Andrea como Oscar, se “olvidan” de Pablo y Bela. Si tienen que mencionar un punto ganado por alguna pareja, es un puntazo impresionante. Si el mismo punto lo ganan los número 1, es un “puntito”. Va con cariño, chicos. No sé si la llegada de Enrique le suma algo de calidad a las transmisiones. Personalmente prefiero a jugadores o entrenadores o ex jugadores comentando. Paquito Navarro salió rápidamente a decir que no estuvo a la altura de las circunstancias. Tiene todo el crédito del mundo de parte de sus fans. Nadie duda de su pasión. Solo fue un partido. En realidad nadie duda de la pareja. Todos sabemos de lo que son capaces “encendidos”. Nos deleitarán con su juego, estoy seguro. Mati y Maxi (lo sumo a Seve), estuvieron en el nivel que se les espera ver. Quizás un poco estáticos en el primer set de la final. El resto del torneo fue intachable. Hoy son la pareja número 2 del World Pádel Tour. Pablito Lima y Fernando Belasteguin dieron cátedra de cómo jugar en equipo, de cómo barrer la pista en defensa en forma conjunta y de cómo atacar con el viejo sistema de ”limpia parabrisas”. Algunas parejas han perdido esta vieja e incontestable estrategia. Tienen en mente a la pareja Juan Martín Y Bela. Actúan como si lo fueran. Les recuerdo que no lo son. En algún otro momento veremos ventajas y, sobretodo, desventajas de jugar 1 atacando y 1 defendiendo. Al final de los años 70, todos los entrenadores, se esmeraban en la TÉCNICA INDIVIDUAL de cada jugador que jugaba al básquet. Se nos mostraba el camino de saber atacar y defender por ciertos sectores y conocimos la ESTRATEGIA. Luego hubo que repetir esas maniobras muchas veces en un partido y se recurrió al avance de la PREPARACIÓN FÍSICA en los jugadores. Aprendimos que el descanso, la alimentación, la hidratación y tantos factores que no se veían eran muy importantes y se habló del ENTRENAMIENTO INVISIBLE. Pero saben una cosa? Descubrimos que todo lo anterior no servía de nada sin una verdadera FORTALEZA MENTAL. Con el paso de los años todo eso se fue viendo también en el pádel. Algún día valorarán más 20 minutos de charla con un psicólogo deportivo que una semana de duro entrenamiento. Hasta la próxima.